Clave 5: Disponer escuelas para saberes y la vida

 

Clave 5: Disponer escuelas para saberes y la vida

 

Bogotá, Colombia

8 y 9 de mayo de 2014

Dirigió: Ramón Moncada

 

En los dos días de encuentro del Seminario Internacional los investigadores y pedagogos invitados se refirieron en diferentes momentos a la relación escuela-ciudad encontrando en este vínculo una excelente oportunidad de formación de ciudadanos.

El día 08 y 09 fue desarrollado un taller orientado porRamón Moncada Cardona[1] (Medellín), con dos auditorios de por lo menos 35 personas cada uno, mediante una metodología inspirada en el maestro Pablo Freire: CAFÉ CONVERSACIÓN. En estos encuentros la circulación de saberes fue el  común en un ambiente de grata camaradería y respeto por la diferencia.

El orientador da inicio estableciendo la referencia conceptual en la cual se enmarca la propuesta metodológica, a la luz de los aportes de  Paulo Freire,  puntualizando los conceptos de:

Taller: Espacio democrático de dialogo de saberes entre los participantes, a partir de la lectura del mundo específico que  se revisa, para construir conocimiento colectivo, en este caso acerca de la relación escuela- ciudad.

Pregunta generadora: Cuestión movilizadora que genera producción de ideas, diálogo, búsqueda conjunta de respuestas; propuesta para la trasformación, y

Círculos de cultura: Espacio de conversación donde se recibe aporte de todos los participantes para responder las preguntas generadoras y proponer transformaciones. Freire hablaba de “transformación de realidades concretas”.

Una vez contextualizado e informado el auditorio de la técnica de trabajo, se propone, una a una,  tres preguntas generadoras que son reflexionadas  en los círculos de cultura, cuyos integrantes se cambian de equipo en cada reflexión. Se enfatiza en el autocontrol del tiempo de expresión de los participantes para posibilitar la palabra de cada uno. Los relatores de cada equipo  socializan  los saberes, comentando las tendencias hacia donde se dirigió la discusión o las ideas expresadas, y el orientador concluye cada momento con algunas consideraciones relevantes frente a lo respondido a cada pregunta.

 

PREGUNTAS GENERADORAS Respuestas a partir de los aportes de los círculos de calidad y sintetizadas por el orientador (Ideas Fuerza)  (Tendencia de respuestas)
¿Qué tanto se aprovecha la vida y las ofertas de la ciudad en los procesos educativos en las instituciones escolares?

 

 

  • Es indudable que no se aprovecha al máximo, quizá por desconocimiento de la oferta, o de las posibilidades que la vida misma en el entorno de la ciudad brinda para formar ciudadanos. Se requiere de actitudes innovadoras de los docentes apropiados de su profesión, para promover proyectos y salidas, con apoyo de los padres y fortalecer la relación escuela – familia.
  • La ciudad debe ser entendida como algo más que la infraestructura, también es la vida que allí circula, las narrativas, las relaciones, las organizaciones… los saberes… Esta relación escuela – ciudad puede potenciarse con la lectura de esos entornos escolares (la cotidianidad).
  • Las políticas deben favorecer las condiciones  para el desarrollo de las “Expediciones pedagógicas”. Se alude al programa desarrollado en la alcaldía de Luis E. Garzón, que favoreció este tipo de ambientes e aprendizaje.
  • Se considera la estrategia de “traer la ciudad a la escuela” teniendo en cuenta las dificultades (económicas, administrativas, de seguridad, protocolos, segregaciones en el acceso, responsabilidades) que los docentes manifiestan para llevar a los niños y niñas a recorrer la ciudad y aprender en ella.
  • En el orden curricular se deben establecer las intencionalidades precisas  de  los  vínculos reales entre la salida y el desarrollo curricular (Entiéndase la NO existencia del término EXTRA_CURRICULAR)
  • Desde la experiencia de 40*40, reconociendo las bondades de la propuesta: CLAN[2], se expresan algunas inquietudes:

Qué congruencia se establece entre el currículo y el programa que se viene implementando? Qué se evidencia desde el campo laboral? Qué pasa con la tercerización?

  • Se considera que la ciudad no solamente debe habitarse y vivirse, es necesario ayudar a construirla y reconocer lo urbano, pero también lo humano,  generándose una nueva pregunta:

¿Cómo hacer humana la experiencia urbana?

¿Qué puede hacerse en las instituciones educativas para conocer y estudiar mejor la ciudad?

 

 

  • Rediseñar  el paradigma educativo, involucrando a los diferentes actores y no responsabilizando solo al maestro. Se requiere de un sistema que formule políticas para favorecer las estrategias de acercamiento entre  la ciudad y la escuela,  de familias que no esperen el “todo Gratis”, de equipos directivos que faciliten y apoyen, de maestros convencidos de que el aprendizaje  no se puede limitar al espacio de la escuela o del aula de clase.
  • Aprovechar herramientas tecnológicas, organizar redes institucionales, sistemas de información de ofertas, y traer la ciudad a la escuela para crear otros escenarios, cuidando de sistematizar las experiencias, que muy seguramente generarán nuevas alternativas de aprendizajes para la vida.
  • Vincular la familia para aprovechar la ciudad  como pretexto no solo para vivirla y conocerla, sino para fortalecer los lazos familiares desde la comunicación que se establece en una salida.
  • Cartografía Social para generar reconocimiento de espacios conocidos y luego espacios no conocidos, desde los entornos más cercanos
  • Fortalecer proyectos de aula que busquen aprendizajes fuera de ella, pero es necesario que se viabilice la participación desde lo económico de la familia, que ha venido descargando su responsabilidad por las políticas de gratuidad.
  • Las realidades son diferentes y los proyectos serán contextualizados, trasversales, institucionales y anclados al PEI, además de permear las realidades de los niños y niñas desde las miradas que ellos hacen de la ciudad, motivando la observación como estrategia de aprendizaje para desarrollar su capacidad de asombro.
  • El maestro debe asumir el papel de ciudadano comprometido, con sentido de identidad y pertenencia .En esta posición asumir el reto de conocerla y estudiarla, para luego  acercarse más a ella  con los niños y niñas .Así, se genera una nueva pregunta:

Cómo un docente, o una familia, no constituidos como sujetos ciudadanos pueden enseñar a otro a ser ciudadano?

¿Cuáles son los principales retos que genera para maestros y maestras el fortalecimiento de la relación pedagógica entre la escuela y la ciudad?

 

 

Frente a esta pregunta generadora, se hace énfasis en que la responsabilidad no es solo del maestro y se invita a pensar en los distintos actores del sistema educativo.

 

Se reflexiona en general los retos desde diferentes actores:

 

  • Fortalecer políticas públicas para que no se limiten simplemente a programas de gobierno  sino políticas de estado, de largo plazo que respondan a un proyecto  de país; recociendo la ciudad como el espacio en el cual los niños y niñas van fortaleciendo su formación ciudadana, contextualizándose desde el entorno más cercano.
  • Comunidad: Integrar la sociedad para diseño de estrategias didácticas identificando las co-responsabilidades en la formación de los estudiantes.
  • Escuela: Establecer canales comunicativos pertinentes, desarrollar talleres de padres, si es posible en compañía de los hijos y en diferentes escenarios de la ciudad. Incorporar todos los espacios de la ciudad como posibles escenarios, tanto lo rural como lo urbano.
  • Padres: Buscar voz y participación en la escuela para hacer visible y audible su intervención en la formación de los hijos. Es importante romper el mito que “la escuela es un parqueadero de los niños”.
  • Equipos directivos: Repensar los procesos administrativos para acercar los actores y flexibilizar los “formatos” del sistema escolar.
  • Maestros: Generar debate frente a lo qué es y lo qué pasa en la cuidad, a la búsqueda de  espacios alternativos para fortalecer el vínculo escuela-sociedad; pero en específico, volver objeto de estudio la ciudad desde proyectos de investigación escolar.
  • El maestro es el eje, entonces, ha de manifestar una actitud más proactiva, fortalecer la conciencia ciudadana, recrear la actividad pedagógica y accionar desde la diversidad para formar niños y niñas. Socializar proyectos, por pequeños que parezcan, dado que estas acciones pueden converger en grandes producciones
  • Estudiantes: Potencializar su capacidad de asombro de tal forma que la cuidad se convierta en una fuente inagotable de saber.

La pregunta ahora:

Cómo lograr integrar los distintos actores para coordinar acciones que permitan hacer de este vínculo un elemento generador de aprendizajes para la vida?

Una vez terminada la reflexión de las cuestiones planteadas, el investigador Ramón Moncada Cardona, precisa a partir de la premisa “La escuela forma para actuar socialmente fuera de ella”  una clara diferencia entre  escolarización y educación, indicando que la primera es solo una parte del todo al cual se refiere la segunda, dado que el proceso educativo se desarrolla  en tres entornos, la familia, la escuela y el entorno sociocultural: la cuidad.

De esta forma el sub-sistema escolar debe tener claridad frente a su función  social, puesto que no se trata de un espacio donde solamente circula información. Si así fuese, fácilmente las TIC pudiesen asumir el papel; pero también le corresponde y con prioridad, la formación de seres humanos que se constituyen como sujetos individuales y sociales preparándose para su encuentro con la sociedad en donde, revelarán con certeza los resultados de los procesos escolares a través de indicadores sociales: Mecanismos usados para la solución  de conflictos, Escala de Valores que establecen los estudiantes y que se evidencian en sus relaciones y acciones, sensibilización frente a la situación social,  índice de embarazo adolescente,  consumo de sustancias psicoactivas, apropiación de lo público, protección del entorno, entre otras. Téngase en cuenta que el subsistema escolar, es solo una parte del sistema educativo.

La posibilidad educadora de la estructura escolar No puede limitarse al aumento de  cobertura, o años de escolaridad; es necesario determinar  con claridad su finalidad en función de la posibilidad formadora que brinda el entorno de ciudad, para direccionar y fortalecer las oportunidades de aprendizajes para la vida. Pero no se trata de recorrerla y conocerla de por sí, hay que seleccionar los espacios e  intencionalidad la lectura de la ciudad desde el contexto curricular en ambientes verdaderamente educadores.

“Desde este punto de vista “La ciudad debe entenderse como un ambiente global de educación y aprendizaje con ambientes, procesos y dinámicas especificas; pero con una definición clara de:

 

¿Para qué se enseña o se aprende en la ciudad? (Finalidad – objetivos)

¿Qué se enseña y qué se aprende en la ciudad? (contenido – currículo)

¿Dónde se aprende en la ciudad? (Espacios educativos)

¿Quién enseña y quién aprende en la ciudad? (Sujetos y agentes de la educativos)

¿En qué momento se aprende y se enseña en la ciudad? (tiempos educativos)

¿Con qué se enseña y se aprende en la ciudad? (dispositivos pedagógicos”)[3]

 

Finalmente el investigador enfatiza que el vínculo escuela- ciudad es de doble vía, la escuela debe ir a la ciudad, pero la ciudad debe ir a la escuela y mediante esta llave preparar a los niños y niñas como ciudadanos, dado que las son complementarias en su papel educador.

 

De otra parte, acompaño el taller la doctora Karla Elizabeth Estrella (Ecuador), quien invito a revisar experiencias de otros países, por ejemplo: España, donde se han organizado intercambios de libros, comunas educativas para atender poblaciones especiales, huertas urbanas, gestión de tierras y otras que permiten multiplicidad de aprendizajes, reconociendo que la ciudad es mucho más que su infraestructura pero que las acciones de las “microagencias” no son suficientes sino que deben enmarcarse en políticas estructurales que permitan la transformación de la educación a largo plazo.

Queda, sin duda alguna, la claridad de que vinculación real de la escuela y la ciudad ofrece un abanico de posibilidades de aprendizaje para la vida, favoreciendo la formación de niños y niñas en medio de la intercultaridad, convirtiéndose en una valiosa oportunidad para el  fortalecimiento de competencias ciudadanas en jóvenes que se integran al finalizar su proceso en educación media, a una sociedad cada vez más globalizada,  incierta y dinámica, en donde deben ejercer a plenitud su ciudadanía.

Para finalizar se debe resaltar la disposición del orientador para escuchar y sintetizar de la forma más puntual los saberes que circularon en los dos talleres realizados, al igual que la oportunidad que el IDEP brinda a los maestros de reflexionar sobre su acción y por supuesto mantener abierta la discusión para buscar e implementar estrategias que permitan a los jóvenes egresados de este nivel escolar habitar la ciudad, vivirla y transformarla.

[1]Director de la Corporación Conciudadanía (con sede en Medellín). Miembro del Consejo Internacional del Foro Mundial de Educación y del Consejo asesor del Instituto Paulo Freire de Sao Paulo.  Ha sido coordinador de proyectos y publicaciones relacionados con el vínculo entre educación, escuela y ciudad.

[2] Centro Local de Artes para la niñez y la Juventud

[3]Ramón Moncada Cardona.  OrientadorTALLER PEDAGÓGICO  CLAVE 5:DISPONER ESCUELAS PARA SABERES Y LA VIDA. 8 y 9 de mayo de 2014

 

Última modificación
21 Agosto, 2015