Por: Nelson Mauricio Reyes Castaño. Ingeniero Industrial, magíster en Administración de Empresas y doctorando en Administración Gerencial. Docente de la Universidad de América. Experiencia docente en el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) e Instituciones IES en las áreas de Gestión Empresarial, Emprendimiento Empresarial, Formulación y Evaluación de Proyectos; sistemas Integrados de Gestión de Calidad y Big Data. Actual estudiante de la Escuela de Maestras y Maestros que Investigan e Innovan - EMMI, del IDEP.
Correo: nmauricioreyes@gmail.com CVLAC: https://scienti.minciencias.gov.co/cvlac/jsp/report-index.jsp
La inteligencia artificial (IA), está desempeñando un papel fundamental en el sector educativo debido a la manera como está transformando la enseñanza y el aprendizaje: se utiliza para aplicar técnicas y algoritmos inteligentes que mejoran y personalizan la experiencia educativa.
A través del análisis de datos, el aprendizaje automático y el procesamiento del lenguaje natural, la IA permite ofrecer a los estudiantes un aprendizaje adaptativo que proporciona retroalimentación personalizada, automatiza tareas administrativas y mejora la eficiencia del proceso educativo.
“La IA en el aula no pretende reemplazar a los profesores…busca potenciar sus habilidades y capacidades”
La personalización del aprendizaje es un campo en el que la IA ha tenido un impacto significativo. Mediante el análisis de datos sobre el rendimiento, las preferencias y los estilos de aprendizaje de los estudiantes, la IA adapta el contenido y las estrategias de enseñanza para satisfacer las necesidades individuales de cada estudiante.
Esto les permite aprender a su propio ritmo, enfocándose en las áreas en las que necesitan más apoyo y avanzando rápidamente en las áreas en las que ya tienen un buen dominio.
Además, la IA llevada a la escuela ofrece la posibilidad de dar retroalimentación personalizada a los estudiantes a través de algoritmos de aprendizaje automático; pero también brinda información precisa e inmediata sobre su trabajo, identificando errores y ofreciendo sugerencias para mejorar.
“Permite a los educadores ahorrar tiempo y enfocarse en actividades más interactivas y de mayor valor pedagógico”
Esta retroalimentación continua y personalizada ayuda a los estudiantes a corregir de manera oportuna y a desarrollar una mejor comprensión de los conceptos. La automatización de tareas administrativas también es un beneficio de la IA en el ámbito educativo.
La IA puede realizar tareas como la planificación de horarios, la gestión de calificaciones y la generación de informes de manera más eficiente y precisa. Esto permite a los educadores ahorrar tiempo y enfocarse en actividades más interactivas y de mayor valor pedagógico.
“...la IA adapta el contenido y las estrategias de enseñanza para satisfacer las necesidades individuales de cada estudiante”
No obstante, aunque la IA en el sector educativo ofrece numerosos beneficios, también plantea desafíos y consideraciones éticas. La privacidad y la seguridad de los datos de los estudiantes son aspectos críticos que deben abordarse de manera responsable.
Además, la IA puede verse afectada por sesgos algorítmicos, lo que significa que las recomendaciones y decisiones generadas pueden perpetuar desigualdades existentes si no se tiene cuidado.
Las tutorías inteligentes en el aula aplicando inteligencia artificial son una herramienta prometedora para mejorar la educación en el siglo XXI. Es importante destacar que la IA en el aula no pretende reemplazar a los profesores, sino que busca potenciar sus habilidades y capacidades.
“Las tutorías inteligentes en el aula aplicando inteligencia artificial son una herramienta prometedora para mejorar la educación en el siglo XXI”
Los profesores desempeñan un papel crucial en la interpretación de los resultados generados por los sistemas de IA, contextualizando la información y brindando una orientación pedagógica integral.